NUESTRA FEDERACIÓN
NUESTRA FEDERACIÓN está constituida por Escuelas de Gestión Social y Cooperativa (EGS) de Buenos Aires (provincia y área metropolitana).
Sostenemos que es posible construir una sociedad democrática y solidaria, en la que la Educación sea parte fundamental del desarrollo humano, como garante de la igualdad de oportunidades.
Nuestro objetivo es alcanzar la igualdad educativa con especial énfasis en la integración social y el respeto a la diversidad. Una Educación que sea reflejo de nuestra cultura(s) y de nuestros valores. Que garantice los aprendizajes implementando proyectos innovadores que den sentido al conocimiento.
Pretendemos Sujetos autónomos y emancipados. Ciudadanxs críticxs. Las EGS son espacios de construcción de Participación Ciudadana que deben ser valorados como tales.
La identidad política está dada por una educación emancipadora que democratiza el conocimiento, revaloriza y reafirma nuestra identidad local, abordando desde nuestra historia, nuestra cultura, aprendiendo de nuestros logros y fracasos, sumando nuestro aporte a la construcción de un proyecto nacional y popular en el marco de la Patria Grande Latinoamericana.
Hemos contrarrestado los nefastos efectos de la Ley de Transferencia de 1994, que desintegró el sistema educativo nacional. Hemos erradicado en lo formal la idea liberal de que la educación pública puede ser indistintamente privada con fines de lucro o estatal, impidiendo la penetración del mercado en el campo de la educación pública. Es por eso que hemos luchado por incluir la categoría EGS en las modalidades de gestión que fuera finalmente considerada en la Ley de Educación Nacional Nro 26,206 actualmente vigente.
La educación como emergente de una cultura, implica transformar en forma integral la vida social de una comunidad. Por ello inspirados en las tradiciones populares, nacionales y latinoamericanas de la última década, es fundamental que legitimemos las múltiples experiencias en el campo educativo, que van más allá de la experiencia propiamente escolar, generando proyectos socio-pedagógicos propios, innovadores, que dan respuestas creativas, sociales, participativas y democráticas, como son las Escuelas de Gestión Social entre muchas otras.
UN COMPROMISO IRRENUNCIABLE HACIA LA NIÑEZ, ADOLESCENCIA Y JUVENTUD
Niñxs y jóvenes se han convertido por derecho en ciudadanxs al otorgárseles derechos civiles y políticos; dejando de ser protagonistas pasivos de la vida social; dándoles el lugar que en realidad les corresponde junto a personas adultas para permitir la convivencia entre generaciones.
Por ello, debe ser un mandato para el Estado (nacional, provincial o municipal) proponer procesos de conocimiento, diálogo y participación como un camino idóneo para convivir.
En esta línea y atendiendo las necesidades de condiciones sociales y económicas desfavorables, consideramos que es estratégico repensar la construcción del Estado desde la dinámica de las necesidades de lxs jóvenes y de las organizaciones de la Comunidad (sociedad civil).
Evaluamos que el deterioro de las condiciones de vida producto de medidas económicas que han generado el deterioro del salario, la reducción de puestos de trabajo, así como el deterioro en términos de impacto económico familiar de la Asignación Universal por Hijo, han generado un retroceso en las condiciones de vida de niñxs y jóvenes, que implica lisa y llanamente una vulneración de derechos (a estudiar, al tiempo libre, al acceso a nuevas tecnologías, entre otros).
Nuestra posición es y será siempre la ampliación de estos derechos, por lo que nos oponemos abiertamente a este tipo de medidas que condenan a nuestrxs niñxs y jóvenes a la pobreza.
LA EDUCACIÓN COMO INVERSIÓN EN UNA SOCIEDAD QUE DEBE GARANTIZAR SU FUTURO
Nos consideramos convocados a proponer y propiciar una Política Educativa de Estado donde integremos tanto las enseñanzas de nuestra rica historia, como las exigencias de una Sociedad que reclama igualdad, inclusión y respeto por la diversidad. Una sociedad que requiere que el conocimiento esté integrado al mundo del trabajo y al desarrollo social.
Para ello se hace necesario administrar los recursos educativos con un claro criterio de “compensación” social.
Consideramos que es potestad del Estado tener la capacidad de establecer una “discriminación positiva” a través de investigaciones y evaluaciones como base para la definición de las prioridades, reconociendo a aquellas instituciones que no tengan fines de lucro y compromiso, y con apertura a la comunidad.
A través de la concertación entre todos los sectores, debe brindarse la garantía de que los recursos disponibles no sean usados discrecionalmente en función de intereses sectoriales.
Planteamos la calidad educativa desde la recuperación de la capacidad de innovación y transformación pedagógica, y a la vez generar condiciones de descentralización y de libertad en la toma de decisiones.
Entendemos que la Educación debe articularse con las necesidades de desarrollo local, con la política de Salud, con la problemática social en toda su dimensión, comenzando con la situación de la niñez, adolescencia y juventud.
LAS EGS Y SU FINANCIAMIENTO
Reivindicamos nuestra rica historia de Educación de Gestión Social, traduciendo nuestras necesidades actuales en materia educativa, sosteniendo junto con el Estado políticas y prácticas sociales que garanticen el derecho a la Educación para todxs.
Teniendo en cuenta su diversidad es posible señalar una constante en las EGS: surgen, en su mayoría, como una necesidad imperiosa de las comunidades y en el seno de ellas mismas. Por lo mismo y como resultado de ello la “autofinanciación” es una variable en la que participa activamente la comunidad educativa. Sin embargo, dada la opción preferencial por lxs más necesitadxs, y las limitaciones que impone el contexto, es destacable que nunca se ha dejado sin educación a ningúnx niñx, joven o adultx que quisiera recibirla. Aunque esto muchas veces implica tener una importante cantidad de alumnos que no pagan cuota (becados o auto becados) hasta la ayuda a las familias en libros, carpetas, costos de viajes y hasta en alimentos mediante comedores o viandas auto financiadas por los miembros de la comunidad. Para nosotros que nunca perseguimos fines de lucro hablar de EGS GRATUITAS representa un paso fundamental hacia la Igualdad Educativa.
Todas las EGS, sin excepción, tienen los siguientes factores a financiar como constante:
El trabajo de lxs educadorxs (docentes y no docentes)
Los gastos generales
Las inversiones por mejoras.
Es en este sentido que sostenemos la necesidad del financiamiento integral de nuestras instituciones, dando cuenta de cada centavo que se invierta, garantizando de esta manera el libre acceso y la autonomía que genera la posibilidad de decidir democráticamente la distribución de los fondos.
¿PARA QUÉ ESCUELAS DE GESTIÓN SOCIAL?
En el marco de las políticas de Estado para la Educación que hemos planteado como mandato en oportunidad del Bicentenario:
Reivindicamos nuestra historia y derechos como Escuelas de Gestión Social porque tenemos legitimidad social al demostrar nuestra existencia real, insertas en una comunidad, con un modelo de gestión educativa de base y origen social, con docentes militantes de nuestros valores, que tienen una ideología popular, y acciones sociales que transversalmente tiñen y dan una particularidad a la gestión pedagógica. Con los aportes de la Educación Popular, la Pedagogía Crítica, nutrimos nuestra Pedagogía Solidaria para el Hacer.
Además, la Ley Nacional de Educación, otorga la legitimidad jurídica que nos reivindica como Escuelas Públicas de Gestión Social.
Por todas estas razones solicitamos:
Ser reconocidas de pleno derecho como Educación Pública de Gestión Social.
La creación de un Registro de Educación Pública de Gestión Social.
El reconocimiento, sistematización y regulación del trabajo educativo en el marco de la Educación Pública de Gestión Social.
Creación de mecanismos de gestión asociada entre la Educación Pública de Gestión Social y las instituciones estatales de Educación y Desarrollo Social.
Con el objetivo final de una política de financiamiento integral que permita la gestión colectiva de los fondos, comenzar por una financiación del 100% para las remuneraciones de su planta funcional + 30% de esa masa para gastos de infraestructura a condición de ser GRATUITAS.
Que se respete la libre elección de los educadores en función a los proyectos pedagógicos institucionales.